He investigado sobre este asunto, y las conclusiones de ello las voy a comentar en este post y en algún otro, como una manera desaber algunos trucos para aprovechar más este dispositivo.
Limpiar los ítems de arranque.
Hay aplicaciones que al instalarse se añaden a la lista de programas que arrancan con el sistema.
No está de más ir a Preferencias del Sistema/Cuentas/Arranque y comprobar que aplicaciones se arrancan y eliminar aquellas que no nos interesen o ya no usemos a menudo.
Comprobar que no tenemos activado el Acceso Universal o el Bluetooth si no los usamos, así de esta forma ahorrremos RAM y ciclos de procesador.
Revisar el apartado de Complementos en Preferencias del Sistema, al igual que los items de arranque eliminaremos aquello que ya no usemos.
Si tienes un Mac Intel, comprueba que usáis la última versión de los programas y sobre todo que éstos sean binarios universales, ya que de otra forma se ejecutarán en el modo de emulación Rossetta, bajando el rendimiento de todo el sistema.
Pon a dieta a los programas, con programas como Xslimmer, podéis eliminar la parte Intel de un programa que sólo se ejecuta en un PowerPC o viceversa.
Si más tarde cambias a un sistema distinto, deberás reinstalar el programa para tener la versión adecuada a tu máquina.
Este truco no afecta al rendimiento del programa, pero si al espacio que ocupa en el disco duro.
Una instalación por defecto de OSX incluye la localización de muchos idiomas, con programas como Monolingual puedes eliminar los idiomas innecesarios de tu sistema, reduciendo el espacio de disco consumido.
Baja la temperatura de tu procesador.
Si tienes un Mac Intel, podéis usar una utilidad como smcFanControl para controlar cuándo se pone a funcionar el ventilador.
Si es un portátil la batería durará algo menos, pero el procesador estará algo menos caliente.
Controla los Widgets.
Cada Widget ejecutándose en Dashboard consume memoria y procesador, ya que están funcionando siempre en segundo plano.
Revisa cuántos Widgets tenéis funcionando y quita aquellos innecesarios.
Usa el Monitor de Actividad para controlar cómo se ejecutan las aplicaciones en el sistema y que consumo de recursos hacen.
Controla el espacio libre en el disco duro, el sistema necesita espacio en el disco para funcionar correctamente, si el disco está muy lleno, puede afectar al rendimiento.
Un programa como Disk Inventory te puede ayudar a detectar dónde estás usando más disco.
Usa utilidades como Onyx diseñadas para optimizar el rendimiento del sistema y realizar tareas de mantenimiento rutinarias.